Crece el fenómeno de los desplazados en municipios*

 

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Aideé Maricarmen González, Procuradora de la Defensa del Menor y la Mujer, dijo que desde el año pasado el número de familias que dejó su casa en los pueblos para irse a vivir con algún familiar a las cabeceras municipales se ha incrementado.

"Se trata de un tipo de violencia, porque es hacinamiento y en una casa habitada por muchos se presentan roces que a la larga va provocando estrés y tensión por invasión del espacio de la privacidad", señaló la Procuradora.

Estos desplazamientos no obedecen al tema de inseguridad, reconoció Aideé Maricarmen, aunque no se descarta que algunas familias abandonen sus tierras por ello.

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Los primeros desplazados en los últimos tres años, se registraron a finales del 2011 y principios del 2012, y fueron los de Tierras Coloradas, en el municipio de Mezquital, y fue por cuestiones de inseguridad.

Después pasó lo mismo pero en Pueblo Nuevo, en la comunidad de Carboneras, y poco a poco fueron familias de otros pueblos que se desplazaban por la inseguridad.

Sin embargo, a mediados del 2012, este movimiento de familias dejó de ser por cuestiones de inseguridad, el problema era otro, la sequía; familias que ya no tenían nada que hacer en sus tierras, donde no había agua ni siembras, tampoco dinero para subsistir se fueron a buscar suerte con familiares en las cabeceras municipales.

"Este fenómeno se dio en varios municipios, pero sobresalen Canatlán, Nuevo Ideal y en Santiago Papasquiaro, y de inmediato, lo primero que hace esta gente, luego de llegar con familiares, es ir a buscar empleo, comentó la Procuradora.

No se tienen cuantificadas por número de familias que han abandonado su casa y sus tierras para irse a vivir a las zonas urbanas de las cabeceras municipales, comentó Maricarmen González.

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TAMBIÉN SE DA EN VICTORIA Y EL SALTO

Pero este fenómeno, comenta la funcionaria, ha crecido en los municipios ya señalados, también se ha presentado en Guadalupe Victoria, Pueblo Nuevo, Gómez Palacio y Lerdo.

En estos dos últimos municipios han llegado familias provenientes de comunidades con niveles de pobreza elevados que ya no tienen nada en sus tierras, ni esperan tenerlo si se quedan en sus pueblos.

Por ello, la procuraduría de la defensa del Menor y la Mujer mantiene un constante acercamiento con los desplazados, para ayudarlos en cuanto al estrés y la tensión, pero también canalizándolos a las estancias municipales para ayudarles a conseguir trabajo.

*Nota publicada originalmente en elsiglodedurango.com.mx [Febrero 24, 2013]

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